sábado, 10 de mayo de 2008

Un regreso al cine de antes


La noche es nuestra

En una era en el que el cine policiaco ha derivado en películas, cuyas tramas únicamente son excusas para el lucimiento del equipo de efectos visuales, las pequeñas joyas como La noche es nuestra adquieren un valor especial. James Gray nos brinda un regreso al cine del nuevo Hollywood, en especial a los valores de la trilogía del Padrino. Y es que al igual que Coppola, Gray nos presenta el retrato de una familia, que al contrario que los Corleonne, representa el lado correcto de la ley. Pero los Grusinsky también tienen un oveja negra, si en el Padrino era Pacino, aquí es Joaquin Phoenix, quién rechaza la tradición familiar a favor de la vida nocturna de alcohol, sexo, drogas, y relaciones mafiosas. Sobre esta interesante premisa se expande una brillante película, en el que todo roza la perfección, en especial el trío protagonista. Pero sin previo aviso, esta excelencia se disuelve a la hora, conduciéndonos a una decadencia del guión en donde la sorpresa da lugar a lo esperado, cuya única salida es un final previsible. Aun así, las relaciones entre los personajes, el reparto, la dirección, y en especial una espectacular persecución, elevan la calidad de esta segunda hora.
A pesar de su irregularidad, La Noche Es Nuestra es una de las mejores películas policiacas del siglo XXI, y por lo tanto una gran inversión de 6 euros.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por el aviso...aunque eso de "una de las mejores del siglo XXI" me parece pretencioso. ¿tan buena es?

se lo preguntare a mi doble de luces joaquin phoenix


by Jero